"EL BÉ DE LA HUMANITAT HA DE CONSISTIR EN GAUDIR AL MÀXIM DE LA FELICITAT QUE ES PUGUI,
SENSE DISMINUIR LA DELS ALTRES." 



Un ser humano es parte de un todo al que llamamos "universo», una parte limitada en el tiempo y en el espacio. Este ser humano se ve a sí mismo, sus pensamientos y sensaciones, como algo separado del resto, en una especie de ilusión óptica de su conciencia. Esta ilusión es para nosotros como una cárcel que nos limita a nuestros deseos personales y a sentir afecto por unas pocas personas que nos son más próximas. Nuestra tarea ha de consistir en liberarnos de esta cárcel ampliando nuestros círculos de compasión de modo que abarquen a todos los seres vivos y a toda la naturaleza en su esplendor.

Albert Einstein

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De los Egipcios a los Esenios

Existe una indiscutible relación entre las prácticas terapéuticas del Egipto del Faraón Akhenaton y los métodos de curación utilizados por los Esenios.
Después de haber caído en el olvido durante milenios, el conjunto de conocimientos que constituye esta tradición emerge de nuevo, viniendo a enriquecer nuestra comprensión del ser humano a través de una visión diferente de la enfermedad y del equilibrio del cuerpo.
De una extrema riqueza y de una gran eficacia, la tradición egipcio – esenia se revela hoy como algo actual.

Del estudio del aura humano a la práctica de una verdadera “cirugía” de los cuerpos sutiles, nos eleva a una visión diferente de la salud global del ser.
Hoy estructurada por Bernard Rouch bajo la forma de un conjunto de cursos, esta enseñanza nos invita a un descubrimiento – o redescubrimiento – del equilibrio sutil existente entre el alma y el cuerpo.

Los objetivos de la formación son:

• Aprender a poner una nueva mirada sobre el mundo y estar así en contacto con la terapia…
• Descubrir nuevos útiles terapéuticos que integran al ser en sus múltiples dimensiones…
• Permitir al terapeuta despertar en lo más profundo de sí mismo al sanador que es verdaderamente, sin fijarlo bajo el sistema de una escuela…

Partiendo del principio de que el aprendizaje de las terapias energéticas es indisociable de un camino de transformación interior, Bernard Rouch llevará a cada uno a un conocimiento más grande de sus propios mecanismos de funcionamiento.

La enseñanza de numerosos ejercicios prácticos, y de meditaciones especificas cultivará igualmente, más allá de la técnica, esa actitud de corazón y del alma que conduce al amor – compasión.


http://bernardrouch.com/es/